Queda poco del bailecito burlesco del presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol, Alejandro Domínguez, para anunciar que el continente tendría tres partidos del Mundial 2030. La noticia, que la Conmebol quiso mostrar como una victoria, se les ha venido en contra con fuerza en los últimos días.
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A la FIFA también, y especialmente a ellos, ideólogos de este "Frankestein" futbolístico. El técnico mexicano Javier Aguirre dijo que era "una mierda" y el entrenador del Leipzig, Marcos Rose, ironizó señalando que "terminaremos jugando en el Everest cuando alguien haga un campo allí y quiera explotarlo".
Hasta en Argentina han comenzado a abrir los ojos. El editor de Deportes de La Nación escribió que "quedó descartada Sudamérica como sede del Mundial 2030, y a cambio recibe tres partidos como consuelo" y el ministro de Turismo y Deportes, Matías Lammens, confesó que quieren más partidos.
La pelota contra el piso
Pasados los días desde la polémica noticia, y ante las críticas y enredos, la FIFA publicó un comunicado a modo de "preguntas y respuestas" para aclarar algunas dudas, y el contenido no hizo más que aumentar la sensación que todo esto es un mamarracho de características históricas:
¿Quiénes son los países sede? Para la FIFA, este Mundial tiene tres países organizadores: España, Portugal y Marruecos. No lo dice así, pero aclara que Argentina, Paraguay y Uruguay son comparsa por el centenario del primera Copa del Mundo de 1930 en tierras charrúas.
¿De quién fue la idea de elegir a estos tres países sudamericanos? Alejandro Domínguez, el presidente de la Conmebol, quiso lavarse las manos y dijo que fue decisión "de la FIFA". Desde Zurich lo desmintieron: "La candidatura de Uruguay, Argentina y Paraguay para la Celebración de Centenario fue propuesta por la Conmebol". Eso significa, además, que la propuesta se venía cocinando desde hace varias semanas en la Conmebol, sin informarle a la ANFP ni al gobierno chileno.
¿Cómo se organizará el torneo con la distancia y los viajes? Atento con lo que dice la FIFA, porque solo aumenta la sensación de que esto se trata de un papelón: el Mundial comenzará "el sábado 8 y domingo 9 de junio de 2030 con la Celebración del Centenario y los primeros partidos de Uruguay, Argentina y Paraguay en casa", pero la ceremonia de inauguración y el "primer partido" será el jueves 13 o viernes 14 de junio en Europa o Marruecos. Confirmado: migajas para la Conmebol.
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Hay más: "El calendario entregará 11-12 días para viajes y descanso", para los seis equipos que jueguen en Sudamérica esos partidos (ni siquiera se puede decir que son los primeros) y luego deban trasladarse a Europa. Una cantidad de días inédita en la historia de los Mundiales.
Pero ojo que existe una esperanza de seriedad, ya que esta candidatura de España, Portugal y Marruecos, que incluye los tres partidos en Uruguay, Argentina y Paraguay, debe igual ser ratificada por un Congreso de la FIFA en los últimos meses del 2024. Tal vez para esa fecha exista una mayoría de federaciones que prefiera salvar el fútbol de las decisiones de Gianni Infantino.
Las claves
- El Mundial del 2023 tenía dos candidaturas: Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay por un lado, España, Portugal y Marruecos por el otro.
- El 4 de octubre, en una decisión supuestamente unánime del Consejo de la FIFA, optaron solamente por dejar la candidatura europea más Marruecos.
- Alejandro Domínguez y Alejandro Domínguez optaron por dejar afuera a Chile sin el más mínimo aviso.