"Hace un año en EEUU lo dimos todo en nuestro viaje madre e hija y que no compartí por estar atenta a las señales del universo". Con ese mensaje Camila Recabarren recordó su bullada travesía en el extranjero, la cual terminó en polémica tras ser acusada de adeudar meses de arriendo a una compatriota.
"El estar, estar presente y consciente de las cosas importantes y relevantes que nos tiene la vida, como saludar en la calle a su gente por ejemplo", reflexionó en sus redes sociales.
Además, destacó el maravilloso crecimiento de su hija y fiel compañera.
"Es increíble lo despierta que logra ser Isabella, darse cuenta del aprender y valorar todo. Aunque sea recién una niña, ya son 10 años de Isabella y de mucho viaje. Me emociona tantas vivencias que nos hemos atrevido a hacer juntas".
Místicas confesiones de Camila Recabarren
Además, aprovechó de mandar un mensaje a los detractores que cuestionan sus decisiones de vida. "Qué digan y piensen lo que quieran. Eso les pertenece a cada uno con lo que llevan dentro, y con lo que el otro les hace reflectar y les resuena o cause algo en su universo interno donde muchas veces ni se reconocen, por estar fuera criticando", sentenció.
"Estamos todos conectados con un mismo ADN, somos uno, que brille la luz pa’ todo el mundo por favor (...) Vamos con fuerza y continuamos. Abro mis ojos, agradezco y no me quejo", concluyó Camila Recabarren sin abordar las acusaciones que recibió de parte de una chilena. quien dijo haberle tendido la mano arrendándole su casa, pero se sintió estafada.
La mujer la acusó de no pagar el arriendo, dejarlo en mal estado y drogarse en frente de su hija. Posteriormente, Camila sorprendió vendiendo piedras y artesanías en las calle; y confesó que robó para darle de comer a su hija pequeña.
Las claves
- Camila Recabarren compartió curioso mensaje a un año de su bullado viaje a EEUU.
- "Lo dimos todo en nuestro viaje madre e hija y que no compartí por estar atenta a las señales del universo. El estar, estar presente y consciente de las cosas importantes y relevantes que nos tiene la vida, como saludar en la calle a su gente por ejemplo" .
- "Estamos todos conectados con un mismo ADN, somos uno, que brille la luz pa’ todo el mundo por favor (...) Vamos con fuerza y continuamos. Abro mis ojos, agradezco y no me quejo".